A LOS TRABAJADORES CONCESIONARIOS DE LOS
MERCADOS DEL MUNICIPIO LIBERTADOR
DE LA
CIUDAD DE CARACAS
Apreciados amigos:
La gravedad de los
problemas políticos y económicos que hoy se puede palpar en Venezuela son
sumamente lesivos y perjudiciales para sus instituciones y para la población,
por ello impactan negativamente a los trabajadores, comerciantes, a la familia
y a la sociedad venezolana en su conjunto
La caída de la
capacidad de compra de la población es una de sus manifestaciones, como consecuencia directa de
la devaluación del bolívar en mas de un 46% llevada a cabo por el gobierno de
Maduro, junto a otras decisiones económicas absolutamente inconvenientes, para
conservar o mejorar la calidad de vida de los venezolanos, entre otras
PRIMERO:
La entrada en vigencia de un conjunto de leyes,
que afectan la propiedad privada y facilitan
al gobierno la invasión y expropiación sin pago de empresas, fincas agro-
pecuarias, edificios, hoteles y viviendas familiares, lesionando la producción
de bienes, especialmente alimentos, de origen animal, como carnes, leche,
quesos, pollo, pescados o alimentos provenientes del medio agrícola
SEGUNDO:
El gobierno en materia económica ha actuado con la explicita idea de desmontar el aparato productivo, ocupando ilegalmente, empresas, fincas y empresas suministradoras de servicios, sin recato alguno, se ha apropiado de empresas generadoras de bienes de consumo directo y de empresas que brindan servicios o insumos para otras empresas.
El Gobierno Nacional,
destruye empresas y puestos de trabajo, sabido es que de 14.000 empresas
existentes en el año 1999, apenas sobreviven 7.000 y que de 600.000 empleadores
sobreviven 400.000, empresas y empleadores continuamente amenazados por
decisiones políticas que obstruyen su desempeño, tales como: la densa carga impositiva, el
“Control de Cambio”, el “Control de Precios”, la “Inamovilidad Laboral” y los
costos laborales; que mayormente afectan al sector de la pequeña y mediana
empresa, la mayor empleadora del país. Todo lo cual nos advierte una severa restricción de
la capacidad de empleo.
TERCERO:
Es determinante, para la salud de la economía venezolana a futuro, que concienticemos que los autores de esta desoladora situación, es la gestión de un gobierno no democrático, que mediante un desempeño fatídico está generando niveles de precios, desabastecimiento, en alimentos, medicinas y falta de viviendas y de servicio eléctrico, en un tiempo y circunstancias donde Venezuela ha recibido mas dinero por la venta del petróleo, en una cantidad superior a la recibida por todos los gobiernos democráticos durante los últimos cuarenta años
CUARTO:
A Venezuela la han convertido en el más grande importador de todo tipo de productos indispensables para el sustento de la población, incluida la importación de gasolina, destinando el año pasado la inmensa cantidad de 60 mil millones de dólares para comprar esos productos en el exterior
QUINTO:
Las consecuencias de esta política son desbastadoras para la sociedad, entre otras razones por las que siguen:
1) Se extinguen y desaparecen empresas establecidas en Venezuela.
2) Desaparecen y merman considerablemente la producción de alimentos cárnicos y de origen vegetal,
3) Desaparecen puestos de trabajo estables y oportunidades de empleos por temporadas u ocasiones
4) Desmejoran los salarios y la calidad del empleo
5) No se reconoce, ni se compensa dinerariamente la productividad, conocimiento y saber experimental del trabajador y
6) Con el concurso de la LOTTT (Del Trabajo), los impuestos del SENIAT y de algunas alcaldías como Libertador, se disminuye la posibilidad de generar nuevos empleos, o mejorar las condiciones salariales aumentando los riesgos de mortalidad de las empresas, emprendimientos y pequeños comercios que aún subsisten
Los efectos y las
consecuencias apuntadas en materia de empleo son claves para Venezuela, ese
deterioro del salario y la imposibilidad de generar nuevos empleos, tantos que
pueda absolver la cantidad de más de 350.000 nuevos venezolanos que se
incorporan al mercado de trabajo, sumado al hecho de que el 60% de la población
está comprendida entre los 15 y los 64 años de edad, la mayoría de la población
venezolana está en edad de trabajar, por
lo demás una realidad demográfica que debe ser atendida asumiendo el reto de
generar empleo y espacios laborales para canalizar el gran potencial que tenemos, por demás razón
suficiente para considerar este asunto como un problema crucial de la sociedad
venezolana, como lo es en otras
sociedades, donde los gobiernos se empeñan en crear condiciones para que se
establezcan empresas o se estimula la iniciativa de emprendimientos personales
o familiares para vencer el desempleo y fortalecer la base material y
espiritual del sustento de la familia
Estimados amigos el Movimiento por la Defensa del Patrimonio
Familiar (MODEPAF) considera importante acercarse al tratamiento de estos
temas, aunque muchos de ellos son laborales o generales, no dejan de estar
conectados con la naturaleza de nuestra actividad como comerciantes, puesto que
nuestros principales clientes son los trabajadores y su capacidad adquisitiva está
condicionada por la interacción de todos estos factores, especialmente el
salario, que es la variable fundamental para determinar la calidad de vida, en
este país, que carece totalmente de políticas de seguridad social de cobertura
general